Todo viene y va, algo se queda pero no se ve. Permanece oculto en un callejón del cual lo único que sabes es lo que te han contado. No tiene final visible,comentan. Algunos dicen que lo alumbra un esplendor, más que esplendor un destello pequeño, dicen otros. Y yo les digo, que esa luz es una ampolleta en mal estado que cuelga de un techo muy alto que solo logras percibir si miras con otros ojos.

Mi intención nunca fue entrometerme en tu vida, sino inmiscuirme debajo de tu piel, de tal manera que ni el más grande huracán ni la tormenta más larga de lamentos pudiera separarme de tu calor.
Tiempo, éste pasó y nunca dejé de intentarlo y aunque nunca fijaste tus ojos en los míos, te robé alguna vez un par de miradas silenciosas, de esas que nos dejaban sin aliento, de esas que hacían volar lejos las palabras e invitaban a que nuestros labios susurraran lo que siempre temieron decir por miedo a quedar solos y lo que tuvieron que ocultar por inseguridad.
Hoy me he tomado la libertad de coger tu sonrisa y guardarla en el lugar que yace la mitad de tu recuerdo y un par de huellas que dejaste aquí.

Podría salir de este círculo vicioso tan rápido como me hiciste perder la confianza.
Podría escaparme, irme lejos donde nadie nunca pueda hallarme.
Podría empujar por un precipicio cada una de tus palabras.
Podría pisar cada una de tus heridas, como en otoño lo hago con las hojas caídas.
Podría apagar todo esto con el más mínimo suspiro.
Podría saciar mis ganas y curar mis cicatrices con medicinas alternativas.
Podría dejar todo atrás y echarme a volar.


Pero no encontraré jamás algo semejante a ti.

Dicotomía de pensamiento y sentimiento que suele matar en tardes silenciosas.
Rencor que brota del más mínimo recuerdo, de las palabras hundidas y enterradas en un campo de falsedad.
Actitudes que son puñetazos directos a esa herida que no deja de doler.

No...

No buscarás en otros brazos el poder que sólo te daban sus abrazos
No caminarás de aquella mano mientras no sueltes su mano
No dejarás que te pese el motivo de su partida
No existirán motivos para extrañarle ni recordarle,además de su sonrisa
No fingirás sentir algo que no existe ni menos que te inventaste
No gastarás minutos de tu valioso tiempo en intentar borrar lo imborrable
No habrá nunca nadie que se le compare y ese es el mayor de tus pesares
No inventarás un mundo para dos cuando simplemente estas tu y su sombra
No juntarás cada uno de los pedazos para reconstruir sobre el mismo espacio
No liberarás tus sentimientos hasta que sepas que te encuentras en lo correcto
No mantendrás tus manos abiertas esperando su regreso aunque sea ese tu mayor anhelo
No necesitarás de su aliento para que tu respiración deje ese ritmo lento
No optarás por el pasado aunque este un poco desenterrado
No podrás vivir nuevas experiencias si te sigues escudando en tus miedos
No querrás dejar partir aquellos recuerdos de los que viviste tanto tiempo
No recibirás su calor mientras esté frío tu corazón
No sembrarás en ella incertidumbre cada vez que la mires por costumbre
No tendrás la sabiduría para enfrentar tu presente si no te esfuerzas lo suficiente
No ufanarás frente a los demás cuando de ella tengas hablar
No volverás a pensar ni un instante en aquel gran error que fue el causante de tu dolor